El coronavirus toco la puerta de la humanidad completa y no a todos les vino a decir lo mismo. A muchos despidieron del trabajo, otros se enfrentaron al virus, unos perdieron personas muy cercanas, y no faltaron los que cumplieron un rol de servicio y ayuda a los demás.

Este proceso nos hace mirar hasta lo más profundo de nuestros pensamientos y necesidades, reinventando sueños, creando nuevas expectativas, adaptándonos al cambio y renunciando a nuestra zona de confort.

Hoy en día vivimos una incertidumbre tanto para los que trabajan y para los que no, donde seguimos expuestos a una realidad que puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos, como ya lo hemos experimentado.

Nuestras emociones básicas juegan un rol muy importante como ser, la alegría, tristeza, rabia y el miedo. De igual manera como los colores primarios, entre más se mezclan aparecen más colores, con las emociones es lo mismo, donde aparecen la desilusión, impotencia, culpa, burnouts o ataques de pánico.

El covid-19 ha traído el acelerador que necesitaban las empresas para digitalizar procesos, flexibilizar, trabajar desde casa, en ese sentido, desde las más pequeñas, hasta grandes empresas, encontraron una solución en el trabajo a distancia, para seguir funcionando durante las primeras semanas del estallido social, evitando así que sus colaboradores se desplazaran desde sus casas a sus oficinas. Algunas ya habían iniciado este proceso con antelación, otras innovaron por la contingencia.

Este modelo llego como una alternativa que podría instalarse de manera definitiva en nuestro país.

Pero ¿Cómo lograr que este modelo de vida sea exitoso?

Primer paso: ¡No entres en pánico!

Estas son algunas de las ventajas y desventajas del Home Office o también llamado Teletrabajo:

Ventajas:

El ahorro de tiempo en traslados y tener menor exposición a factores estresantes como la inseguridad de la ciudad y el contagiarse, son algunos elementos que logran que el colaborador tenga mayor calidad de vida. Otro punto a favor de este sistema es que permite ayudar al medio ambiente de la contaminación de vehículos privados y públicos.

Desventajas:

• Trabajar en casa aumenta el riesgo de que las jornadas sean interminables (24 horas del día, 7 días a la semana) y de hacer una vida más sedentaria. Otro punto en contra, es no contar con todo el material de escritorio y el espacio que brinda estar en una oficina.
• Hacer la gestión home office exige que tanto líderes como equipos miren el escenario actual con nuevos ojos, ya que se necesita aún más sinergia para garantizar los resultados.
• Todas las inquietudes no solo se encuentran afuera…te invito hacer una introspección para descubrirte y encontrar ese malestar.

*Psicóloga Gabriela Arredondo Vivas, graduada de la Universidad Evangélica Boliviana, con experiencia en el área de recursos humanos.