FOTO ARCHIVO: ETANOL 

FUENTE: Hans Montaño Núñez / hmontano@money.com.bo>

Las industrias azucareras de Santa Cruz observan que la comercialización de etanol tropieza con inconvenientes en esta primera etapa. La estatal petrolera YPFB hasta la fecha adeuda a Guabirá alrededor de $us 200 mil por la venta de la producción de 280.000 litros de alcohol que entregó en noviembre.

El caso de Guabirá fue planteado por el presidente ejecutivo, Mariano Aguilera, teniendo en cuenta que es la primera factoría que incursionó en la producción de este biocombustible, con una capacidad inicial de 70.000 litros por día.

“Esperemos que hoy miércoles se firmen todos los acuerdos y se establezca qué va a pasar en los próximos cinco años. Ese es el compromiso que tenemos con el Estado boliviano, que se plasmen los documentos cómo se va a entregar y cómo se va a pagar. Pese a no estar nada firmado, se ha invertido en este país”, argumentó Aguilera. Cabe señalar que YPFB produce la gasolina Súper Etanol 92, con una mezcla de alcohol anhidro como aditivo al 12% en una mezcla con gasolina base al 88% por cada litro del combustible.

Asimismo, Aguilera sostuvo que Guabirá ha apoyado “100% al sector cañero no sólo con discursos sino con acciones” y con tecnología de primer nivel, tanto en capacitaciones a los recursos humanos como en equipos. En este entendido, valoró el apoyo de la unidad técnica, del Centro de Investigación Tecnológica y de Transferencia de la Caña de Azúcar (Cittca) dependiente de Guabirá y de la Unión de Cañeros Guabirá (UCG)

Guabirá espera que a finales de enero de 2019 arriben los últimos equipos para el montaje de la planta deshidratadora de alcohol de última generación, que tendrá una capacidad de más de 1.000.000 de litros/ día. Con esta implementación e instalación prevista en febrero o marzo, la capacidad instalada aumentará a 1.100.000 litros de alcohol por día.

Guabirá ha invertido aproximadamente $us 20 millones en tierras de los cañeros, en fábrica, destilería, tanques y otros implementos, casi $us 15 millones; y la planificación de inversiones continúa para los próximos dos años, “dependiendo qué pase con los contratos con YPFB para acelerar o seguir al ritmo que vamos”.

Aguilera reconoció que el proyecto del etanol “está comenzando, no es fácil, sin defender a nadie también, pero creo que en los próximos días se va a dar solución y firmando el contrato quedando establecida totalmente la problemática”.

Por su parte Luis Barbery, presidente  del ingenio Unagro y de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (Fepsc), manifestó que observa perspectivas positivas en el crecimiento y evolución de este nuevo producto en el mercado, con una demanda que se incrementará “gradualmente en los próximos cinco años.” Reiteró que es una medida gubernamental con un impacto económico sin precedentes, y “un tema que no tiene reversa, pero que es lento y gradual que dará sus frutos que todos vamos a comprobar.” Unagro invirtió $us 45 millones, al igual que su sector cañero.